miércoles, 17 de abril de 2013

Tiempo de ensaladas...


Ya sea por la llegada de la primavera (o por el apuro de la operación bikini...), las ensaladas entran en nuestros menús diarios de muchas formas y con muchos colores.

La ensalada que os propongo hoy tiene un sabor especial, la mezcla de ingredientes no hace que cada elemento pierda su sabor particular, creando una ensalada muy fácil de hacer y de la que siempre querrás repetir.

Como ingredientes principales de nuestra ensalada, tenemos espinacas, nueces y queso parmesano.




No soy ninguna experta, pero por lo que he leído, las espinacas son ricas en fibra y vitaminas, son muy poco calóricas, y comidas en crudo nos aportan una dosis extra de proteínas y vitaminas que normalmente perdemos al cocinar las verduras.

En cuanto al parmesano, no tengo palabras, a mí es el queso que más me gusta, ese sabor seco e intenso me encanta, además existen un montón de recetas (muchas de cocina italiana) con las que utilizar este queso.

El parmesano, como no podía ser de otra manera, tiene su propia página web, y es importante que al comprarlo tengamos en cuenta el sello de Denominación de Origen y el mes y el año de producción entre otras cosas.





Por último, las nueces, que aunque todos sabemos que los frutos secos son muy muy muy calóricos, comer dos o tres nueces al día nos puede ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares, reducir el colesterol y aportar al cuerpo una dosis extra de antioxidantes.




ENSALADA DE ESPINACAS, NUECES, BACON, MANZANA Y PARMESANO

INGREDIENTES

- Espinacas
- 1 manzana en cuadraditos
- Unos taquitos de bacon
- Un puñado de nueces
- Parmesano rallado
- Aceite de oliva
- Crema de módena
- Semillas de sésamo
- Sal

Lo primero, en un sartén pequeña echamos los taquitos de bacon y los dejamos que se vayan dorando. Mientras, colocamos las hojas de espinacas en un bol grande y lo llenamos. Cuando el bacon está crujiente, le añadimos la manzana cortada en cuadraditos, apagamos el fuego y lo dejamos unos segundos. Añadimos el bacon y la manzana a las espinacas (que ya hemos salado), luego añadimos unas nueces y rallamos parmesano encima.

Para la vinagreta emulsionamos aceite de oliva, crema de módena y semillas de sémano y repartimos por nuestra ensalada.

Como veis, esta ensalada es muy fácil de elaborar y hacerme caso, está buenísima.

¿Qué otros ingredientes se os ocurren?





martes, 9 de abril de 2013

Champiñones rellenos


La receta de champiñones de hoy la he descubierto hace poco. Los champiñones rellenos son todo un clásico, pero esta variante de champiñón rebozado hace poco que la he cocinado por primera vez, y la verdad siempre triunfan, muchas veces me la pide mi madre que le encantan.

INGREDIENTES (para 4 personas)

- 18 champiñones grandes
- 4 lonchas de bacon
- 400 ml. de nata de cocinar
- 1 huevo
- pan rallado
- pimienta blanca


ELABORACIÓN

Lavamos bien todos los champiñones, y les quitamos el pie. Seleccionamos 12 (los más grandes) y los colocamos en una sartén grande con una gota de aceite para que se vayan dorando (tenemos que cocinarlos por los dos lados y salarlos por los dos lados). Cuando los champiñones ya estén dorados, los retiramos a un plato y los reservamos mientras elaboramos la salsa (es bueno que reposen 5 minutos que así sueltan todo el agua y es más fácil trabajar con ellos). 

A continuación cortamos en trocitos pequeños los champiñones y los pies sobrantes, y también los cocinamos en una sartén con una gota de aceite y un pellizco de sal. Cuando vemos que ya casi están cocinados, añadimos las lochas de bacon también troceadas y esperamos un minuto a que se cocinen. Cuando ya tenemos los champiñones y el bacon listos les añadimos un poco de nata, lo suficiente para hacer una salsita espesa, fácil de manejar, que dejaremos enfriar un minuto para comenzar a rellenar con ella los champiñones (de esta mezcla de nata, bacon y champiñón, sobrará más o menos la mitad para después hacer con ella una salsa más líquida que acompañará a los champiñones rebozados).




Cuando ya tenemos los champiñones rellenos, los pasamos por huevo y pan rallado y freímos en una sartén con aceite bien caliente. Los sacaremos a un plato cuando estén dorados por ambos lados.

Mientras se hacen los champiñones, nos ponemos manos a la obra con la salsa, que no es otra cosa que regar con nata de nuevo la mezcla con la que hemos rellenado los champiñones, echar una pizca de sal y un poquito de pimienta blanca y esperar unos minutos a que se cocine y se ponga un poco espesita (si espesa demasiado se puede añadir un poquito de leche en el último minuto para rebajar).

Como veis, la receta es muy sencilla y os aseguro que sale un plato muy muy rico.






Esta receta, ofrece muchas variantes, ya que los champiñones se pueden rellenar con diversos ingredientes como espinacas, cebolla, pollo, o quesos como parmesano, ricota, etc.

Espero que os animéis a cocinar estos champiñones y os gusten la tanto como me gustan a mí.




sábado, 6 de abril de 2013

Tarta Guinness

¡¡¡¡Hoooolaaaa!!!!

Después de muuuuchos meses vuelvo a actualizar el blog, y lo hago con una tarta buenísima, de la que el primer día que escuchamos hablar de ella no la queríamos probar! 

La primera vez que escuché hablar de la "Tarta Guinness" fue de boca de mi amiga María, que tenía muchas ganas de hacerla (nosotros al principio estábamos un poco dudosos, ¿una tarta de cerveza?), y al final, la hizo para una cena que organizamos en mi casa. Al probarla, nadie sabía exactamente a lo que sabía, lo único que teníamos claro es que queríamos repetir, repetir y repetir! Jejejeje

Desde esa primera experiencia con la Tarta Guinness siempre pensé en hacerla, aunque nunca encontraba el momento, hasta este fin de semana, que celebramos un cumpleaños y me lancé. El resultado buenísimo, una tarta jugosa, con un sabor muy peculiar y que te deja con ganas de volver a comer un trocito.

Bueno, allá vamos!

INGREDIENTES

250 ml. de cerveza Guinness
250 gr. de mantequilla
75 gr. de cacao en polvo
400 gr. de azúcar
250 gr. de harina de repostería
2,5 cucharaditas de bicarbonato
140 ml. de nata líquida para montar
2 huevos
1 cucharadita de vainilla

Para el Frosting
300 gr. de queso tipo Philadelphia
150 gr. de azúcar glass
360 ml. de nata líquida para montar


ELABORACIÓN

Ponemos en una olla la cerveza a fuego medio y dejamos que caliente, pero sin llegar a hervir. Cuando la cerveza esté caliente incorporamos la mantequilla en dados y removemos hasta que se integre con la cerveza. Retiramos la mezcla del fuego y dejamos reposar.

En un recipiente mezclamos la nata, la vainilla y los huevos y batimos con una varilla para mezclar bien. Cuando estos ingredientes están bien mezclados los incorporamos a la mezcla de cerveza y mantequilla.

Para finalizar mezclamos en un recipiente la harina, el azúcar, el cacao y el bicarbonato y movemos un poco para que se mezclen todos los ingredientes. Cuando está todo mezclado lo vamos incorporando poco a poco a la mezcla anterior de cerveza, mantequilla, nata... y batimos fuertemente con una varilla hasta conseguir una masa uniforme que volcaremos a un recipiente engrasado y meteremos en el horno a 180ªC durante 50 o 60 minutos. La mezcla queda bastante líquida, pero no pasa nada, luego al cocer, se queda esponjosa.




Mientras se enfría la tarta, preparamos el frosting de queso para cubrirla.

Por un lado montamos la nata en un recipiente y por el otro mezclamos con las varillas en la batidora el queso y el azúcar hasta conseguir una crema suave que mezclamos suavemente con la nata..

Decoramos la tarta, la dejamos enfriar en la nevera y a comer!!!